Todo es vanidad

Cinco cosas rápidas.

Hola hola hola, buenas noches desde Sant Antoni, donde ya hay luces encendidas en las calles y el aire huele a churros y en el mercado puedes ver gambas bastantes gordas porque, en fin, estamos en esa época bonita y horrible que es la Navidad.

Bien, enviamos esta newsletter escrita a toda prisa en el sofá mientras Abi mira la tele y pide, por favor, no trabajar a estas horas porque no puede, es que no puede más, que le duelen las manos del cartón y la espalda y qué sé yo lo que le duele, es que no tiene ni energía para decir los músculos que le duelen que son todos todos todos. ¿Y por qué si las circunstancias son tan precarias y tan apresuradas enviamos una newsletter? Pues por el mismo motivo por el que la gente debería hacer podcasts o subirse a un escenario: porque hay cosas que decir. [Sí, ya sé que la mayor parte de la gente que hace podcasts no tiene nada que decir, pero ya se entiende la intención de la frase].

Básicamente venimos a decir cinco cosas, todas bastante importantes:

1.

Si tenéis compras de Navidad y queréis que os lleguen hacedlas ya, ahora. Ya vais tarde, de hecho. La cosa ya va fea pero aún llegaría. Creemos.

2.

PERDÓN CON EL RETRASO DE LA BOX. YA LLEGA, YA LLEGA.

(En la foto: Abi haciendo boxes)

La campaña de Navidad está siendo más dura de lo esperado (eso es bueno) y se nos ha acumulado el trabajo (eso es malo). A la imprenta le ha pasado lo mismo y nos han llegado algo tarde los materiales de la caja. Pero muchas han salido ya hoy lunes y el resto saldrá mañana. Como sabéis, los suscriptores de la box pueden aprovechar el envío para añadir compras y tener el envío gratis: hemos dado prioridad a esos paquetes por si había algún paquetillo que se necesitaba para Navidad.

Os está gustando mucho el libro de noviembre, o sea que guay. Y justo esta semana hemos decidido ya el de febrero. Generalmente la cosa va así: Kike está leyendo en la bicicleta estática (él lee así) y entonces grita “¡tenemos nueva box!” y toda la casa es alegría.

Pues eso, que pedimos disculpas. Pero sí, tendréis lectura para Navidad. Y si te quieres apuntar, puedes hacerlo aquí. Empezaremos el año con risas con el libro de enero.

3.

Esto merecería una newsletter exclusiva, pero ahí va: ya tenemos cartel de La Llama Fest.

Ya hemos vendido más de la mitad de los abonos y todavía no hemos anunciado un solo nombre, lo que es increíble. Muchas gracias por la confianza. Si queréis comprar o regalar entradas podéis hacerlo aquí.

Aquí tenéis una versión del cartel en toda su gloria:

Idea y pintura de María “Lamasqwerty” Ley / Diseño de Javier Jaén.

El concepto del cuadro (me gusta explicarlo porque es muy guay) remite a las vanitas del barroco: naturalezas muertas con flores secas, elementos de caza y una calavera que recuerda que todos somos mortales, que nada importa, que todo es fugaz, etc. María (que como veis es una pintora excelente) ha sustituido la pieza de caza y la calavera por una piel de plátano y una dentadura saltarina de broma. Luego se lo enseñamos a Javier Jaén solo para que lo viera y él añadió las pegatinas. Chulo, ¿eh?

4.

El calendario de la tienda de estas semanas:

5.

Como sabéis, cada año hacemos una postalilla de navidad que incluimos en cada compra y que podéis usar para escribir cosas detrás o poner el nombre del destinatario de cada regalo. La de este año es sencillita porque la hicimos deprisa y corriendo pero ha quedado bastante pintona:

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Ya está. Eso es todo. Muchas gracias. Newsletter muy técnica otra vez. Datos. Información. Poca guasa. Sabemos que hace un par de años estas newsletters eran mensuales o incluso quincenales pero ahora nuestra señora hija, doña Emilia Enrech, nos impide trabajar nuestras acostumbradas doce o catorce horitas diarias. Casi mejor.

Respecto al nuevo local: por increíble que parezca, sigue en obras. Efectivamente, no hemos llegado a tiempo de abrir en Navidad. Preferimos no pensar en ello. Y sobre todo, preferimos no calcularlo. Haremos la mudanza en enero y arrancaremos bien pronto con las primeras actividades. Va a estar muy guay.

La Llama